miércoles, 2 de diciembre de 2009

Allí en mi estad entre las antigüedades y cosas raras que vendía también solía exponer algunos de mis cuadros y me gustaba escuchar los comentarios que la gente hacían sin saber que yo era el autor y les estaba escuchando gente que venían los domingos por el centro mas a pasear y a mirar que a comprar.

Como caso anecdótico les contare que allí en el están de mercantic uno de los cuadros realizados por mi y que se trataba de una bailarina de ballet sobradita en kilos bailando y ataviada con su tutu sin previo aviso me fue copiada y convertida en el tema central de un inmenso mural que hicieron y del que yo me quede muy sorprendido al verlo el domingo al llegar a mercantic puesto que lo habían realizado durante la semana y sin avisarme ni pedirme autorización para ello, pero dicho mural con el tiempo fue derribado por necesidades de ampliación y el cuadro vendido en los encantes de Barcelona.

Transcurrido el tiempo y una vez terminadas mis actividades como comerciante en mercatic pude alquilar el local que se quedo vacio justo de debajo de mi casa y vivienda el cual estuve utilizando como almacén de los géneros que vendía en el puesto de los encantes y como taller de pintura en donde proseguí en el intento de unir mis pinturas con mis poesías así tuvo lugar una serie de obras que constaban cada una de dos cuadros uno era el lienzo pintado al oleo y el otro la poesía referente al tema del cuadro hechos para ir el uno junto al otro. Pero tras unos tres años aproximadamente de tener el local alquilado empezaron a surgirme los primeros síntomas de la enfermedad que padezco en la actualidad que en un principio en la cruz roja de la C/ Dos de Mayo me diagnosticaron como ansiedad pero que tiempo después y viendo que la cosa empeoraba en el Hospital de San Pablo tras muchas pruebas neurológicas me diagnosticaron una atrofia cerebral multisismatica progresiva vamos una enfermedad que te va paralizando y que no tiene cura ni tratamiento y así estamos sin poder pintar y esperando a ver si conseguimos aguantar hasta que descubran alguna cura o tratamiento para ella sino me espera un final muy lamentable para cualquier persona pero más para una personalidad inquieta y bohemia como la mía.

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